miércoles, 28 de marzo de 2018


ANA MARIA BENITEZ
Correo Electronico:Portugueira@hotmail.com
Teléfono; 0243 2152830- 04144517478

REPUBLICA BOLIVARIANA DE VENEZUELA
UNIVERSIDAD BICENTENARIA DE ARAGUA
VICERRECTORADO ACADÉMICO
DECANATO DE INVESTIGACIÓN, EXTENSIÓN Y POSTGRADO
SAN JOAQUÍN DE TURMERO – ESTADO ARAGUA


EDUCACIÓN PARA LA PAZ
LA ESCUELA Y LA  CALLE: CONDENSOS DE LA PAZ ESCOLAR



DOCTORADO EN CIENCIAS DE LA EDUCACIÓN
FACILITADOR: DR. BENNY J. MÁRQUEZ F.
PARTICIPANTES: ANA BENÍTEZ

SAN JOAQUÍN DE TURMERO, MARZO 2018



SÍNTESIS CURRICULAR DE LA AUTORA

I.   DATOS PERSONALES:
Nombre completo: ANA MARÍA BENÍTEZ
Cédula de Identidad: V- 15709844
Correo Electronico:Portugueira@hotmail.com
Teléfono; 0243 2152830- 04144517478
Lugar y fecha de Nacimiento: Trujillo 1/1/1979
II. ESTUDIOS REALIZADOS:
Profesora.  En Educación Preescolar (Universidad Pedagógica Experimental Libertador, Instituto Pedagógico Rafael Alberto Escobar Lara –Diciembre 2012)
Magíster en Educación. Inicial. (Universidad Bicentenaria de Aragua. Maracay  julio de 2017).
Actualmente cursando estudios doctorales  en Ciencias de las Educación (Universidad Bicentenaria de Aragua).
III. EXPERIENCIA LABORAL:
Docente de aula de Educación Inicial categoría III desde Septiembre de 2008 hasta la actualidad Preescolar La Romana –Maracay Edo-Aragua.






RESUMEN

El presente artículo tiene por objetivo principal analizar la relación entre la  escuela y calle: condensos de la paz escolar .Entendiendo que la escuela el centro esencial del desarrollo psico-social y de la personalidad, así como la culturas, del individuo, por lo que la escuela está orientada a fortalecer los valores preestablecidos ya conducir la formación de los saberes, de igual manera, la comunidad es el espacio de interacción social de los ciudadanos, que contribuye con la formación integral del ser humano. La educación para la paz no es una opción más sino una necesidad que toda institución educativa debe asumir. Los principios para una convivencia pacífica entre pueblos y grupos sociales se han convertido en un imperativo legal. Ahora se trata de conseguir que el derecho formal de la paz se convierta en un derecho real. Educar para la paz es una forma de educar en valores. La educación para la paz lleva implícitos otros valores como: justicia, democracia, solidaridad, tolerancia, convivencia, respeto, cooperación, autonomía, racionalidad, amor a la verdad. La educación en valores es un factor importantísimo para conseguir la calidad que propone nuestro sistema educativo. La finalidad es fomentar la paz y la convivencia en el ámbito escolar.

Esta investigación  es de tipo documental. En la misma se concluye que la  paz escolar debe estar orientada a la educación en valores centrada en la familia siendo la escuela y la comunidad agentes socializadores que modifican y reafirman la conducta y las normas aprendidas en el entorno familiar.


Palabras Claves: La Escuela. La calle. Paz Escolar.  Education. Valores






ABSTRACT

The main objective of this article is to analyze the relationship between school and street: condenses of school peace. Understanding that school is the essential center of psycho-social development and personality, as well as cultures, of the individual, so that the school is oriented to strengthen the pre-established values ​​and to lead the formation of knowledge, in the same way, the community is the space of social interaction of the citizens, which contributes with the integral formation of the human being. Education for peace is not an option but a need that every educational institution must assume. The principles for a peaceful coexistence between peoples and social groups have become a legal imperative. Now it is about getting the formal right of peace to become a real right. Educating for peace is a way of educating in values. Education for peace has implicit other values ​​such as: justice, democracy, solidarity, tolerance, coexistence, respect, cooperation, autonomy, rationality, love of truth. Education in values ​​is a very important factor to achieve the quality proposed by our educational system. The purpose is to promote peace and coexistence in the school environment.

This investigation is documentary. In it, it is concluded that school peace should be oriented to values ​​education centered on the family, with the school and the community as socializing agents that modify and reaffirm the behavior and norms learned in the family environment.


Keywords: The School. The street. School Peace Education. Values








Introducción


La escuela  es de vital importancia, en la vida de las personas, entre sus objetivos fundamentales se encuentra promover la convivencia social entre los ciudadanos, la cooperación, el compromiso y la colaboración de sus educandos para la realización de contenidos valorativos, comunitarios y democráticos, los cuales forman parte de las experiencias y vivencias de sus alumnos, donde interactúan cada día configurando identidades entre los ciudadanos.

De igual manera el propósito de la educación debe estar centrado en el aprendizaje, a partir de él debe evaluarse al alumno, al docente y a la calidad de proyectos educativos, que no tiene sentido si no se traduce en más y mejores conocimientos (el saber), más y mejores destrezas y habilidades (el saber hacer), y más y mejores actitudes y valores (el ser). Es decir, la educación debe proporcionar habilidades intelectuales, habilidades sociales y desarrollo personal, partiendo de allí la construcción del ser humano.

La calle como un espacio de convivencia social donde interactúan las personas y donde confluyen comportamientos compartidos por sus miembros, que buscan transmitir sus valores, creencias, actitudes y experiencias en común acuerdo y comunitarios en defensa de sus derechos, deberes y obligaciones como ciudadanos de una nación.

La  escuela y comunidad establecen reglas de convivencia social, comportamiento y actitud de sus miembros en la construcción de una sociedad más equitativa y solidaria, la cual se da por medio de la educación en valores de sus ciudadanos.

El reto que debe asumir cualquier, escuela y comunidad es la formación de los ciudadanos, cuya actuación garanticen el buen funcionamiento y cumplimiento de las normas, leyes y pautas democráticas que regulan la acción social de todos los ciudadanos y ciudadanas.

De lo anterior podemos deducir que no debemos solo educar a los ciudadanos para la obtención de un título, con el propósito de adquirir solo ganancias económicas, muy por lo contrario debemos formar al ciudadanos más humanista, consciente de su necesidad sociales, y colectivas, para el beneficio de las comunidades y del bien común.

En palabras de Kliksberg (2003), la formación ciudadana, fundamentada en sólidos principios ético, es la única vía que tiene la sociedad para garantizar la educación de ciudadanos dignos y virtuosos que contribuyan al desarrollo y progreso de sus comunidades.

Este es el reto de los padres, docentes y líderes políticos en general. Una manera de enfrentarlo es formar personas con alto grado de confianza en sí mismo, responsable, participativa, ganada para el voluntariado, dispuestos al trabajo comunitario, con conciencia cívica, que actúen responsablemente guiadas por principios éticos. Esto significa formar un ciudadano que represente un factor de desarrollo para la nación.

El presente artículo tiene por objetivo principal analizar la relación entre la  escuela y calle: condensos de la paz escolar.



Escuela y comunidad
Es importante resaltar la función que desempeña la escuela y las comunidades en la formación de valores ciudadanos, la escuela como espacio público donde se desarrollan las capacidades humanas y de conocimientos de los individuos, a través de contenidos programáticos de carácter educativo en función de adquirir conocimiento necesario para la transformación social de las personas y por ende de la comunidad.

Según Giuliano. F. (2004) la comunidad puede entenderse, en términos generales, como lo que la gente” siente” y “piensa” respecto a su propia comunidad. Y cuando decimos comunidad, estamos diciendo personas conviviendo con otras personas y en un lugar determinado, construyendo un mundo de vida propio, con sus intereses, sus costumbres, su cultura, sus conflictos, sus aspiraciones y sus esperanzas. Así, en ese contexto, surge el sentimiento y la conciencia de la pertenecía comunitaria como una expresión nítida del sentido de comunidad al cual nos referimos.

Continúa diciendo el autor la compresión de este modelo es de vital importancia para el quehacer comunitario, puesto que se ha demostrado que cuando el sentido de comunidad es positivo, hay mayores condiciones para la participación comunitaria, en tanto que aquellas comunidades que presentan débil el sentido de comunidad, suelen presentar mayores niveles de apatía y desorganización.

De igual forma se hace necesario comprender que el sentido de comunidad no es un “producto” acabado, ni una definición en abstracto. Por el contrario se trata, en realidad, de un proceso dinámico surgido de las permanentes interacciones sociales y comunitaria, la cual se expresa en la conciencia y en la afectividad de los ciudadanos, pero que no nace por sí misma sino que en el se implican a su vez varios componentes y elementos sociales, los cuales están dentro de un procesos claramente desarrollados en la comunidad.

En este sentido en la comunidad se comparten un conjunto de factores sociales ligados a símbolos, códigos de lenguajes, celebraciones, costumbres, valores, creencias y tradiciones culturales que representan a una comunidad de otra comunidad. Este conjunto de símbolos, creencias y valores compartidos representan un verdadero sistema que contribuye a la unión de los habitantes de la comunidad.

 Paz Escolar.
Podemos realizar una breve retrospectiva histórica, recordando que la educación para la paz se inicia con el movimiento de la Escuela Nueva, recibe el apoyo institucional de la UNESCO, se enriquece con el ideal de no-violencia y continúa su andadura a través de la Investigación para la Paz y el Desarrollo. Superada la clásica oposición paz contra guerra, actualmente se propone la paz como antítesis de la violencia, la llamada paz positiva. Este aspecto encuentra su mejor marco de actuación pedagógica dentro del modelo socio cognitivista de Vigotsky (1979).

La moderna educación para la paz asume creativamente el conflicto como un proceso natural y consustancial a la existencia humana. La educación para la paz ayuda a la persona a desvelar críticamente la realidad compleja y conflictiva para poder situarse en ella y actuar en consecuencia. Educar para la paz es invitar a actuar en el microcosmos escolar y en el macronivel de las estructuras sociales. Los componentes de la educación para la paz son: la comprensión internacional, los derechos humanos, el mundo multicultural, el desarme, el desarrollo, el conflicto.

Las reformas educativas insisten en la necesidad de una educación para la ciudadanía y los valores en general .La  Paz es definida por la Asamblea General de Naciones Unidas como “Un conjunto de valores, actitudes, tradiciones, comportamientos y estilos de vida”, basados en una serie de derechos fundamentales para el desarrollo de una vida plena y pacífica, marcándonos unas metas a conseguir y unos valores a transmitir, que se recogen en el Manifiesto 2000.

Con estas características, pensamos que sin duda es la educación el instrumento óptimo para construirla; nuestro compromiso como docentes en este marco, es promover la paz como acción colectiva e individual, saber convivir con los conflictos y detener, disminuir y en cualquier caso, prevenir las manifestaciones de violencia (Tuvilla, 2003).

A lo largo del tiempo se han ido sucediendo una serie de acontecimientos históricos relevantes en pro de los Derechos Humanos y de la Cultura de Paz, entre ellos destacaremos  la proclamación por Naciones Unidas del decenio 2000-2010 como Decenio Internacional de una Cultura de Paz y No violencia para los niños del mundo, por ser este acontecimiento en el que se contextualiza el presente trabajo. A través de esta declaración, se insta a los países a adquirir el compromiso de fomentar la Cultura de Paz en todos los ámbitos de la vida.

A  partir de aquí, son muchos los países y organizaciones que se han sumado a este compromiso; como ejemplo de ello, en el campo educativo, tanto la Administración central, como las distintas comunidades autónomas, desarrollan políticas educativas que vienen a fomentar la Cultura de Paz (Sánchez, 2007a). En la Comunidad Autónoma de Andalucía, se pone en marcha en el año 2001 el Plan Andaluz de Cultura de Paz y No violencia[4], cuyos ámbitos de actuación son: el aprendizaje de una ciudadanía democrática, la educación para la paz y los derechos humanos, la mejora de la convivencia escolar  y la resolución pacífica de los conflictos. Sin duda, este Plan ha supuesto un cambio fundamental en la política educativa de nuestro tiempo, al confiar en la educación como instrumento indispensable para potenciar una Cultura de Paz en la sociedad.

La educación para la paz, como tema transversal aplicable en las distintas áreas y momentos del aprendizaje, sintetiza ambas posturas, distinguiendo la naturaleza de los problemas a investigar y aplicando a cada uno el método más adecuado para indagar en la realidad natural o sociopolítica. Se produce un interés crítico por el conocimiento. Se busca la ciencia de la diferencia y de la democracia participativa. La aceptación de las diferencias no sólo es una obligación moral y política, sino que se puede convertir en un excelente medio de enriquecimiento personal y social. Se trata más bien de mejorar las cosas, no tanto de dominarlas. El objetivo global es favorecer la emancipación de la persona y de la humanidad en su conjunto.

Vemos que se ha producido un cambio axiológico desde el racionalismo moderno, pasando por el vitalismo postmoderno, hasta llegar a la visión integral de los temas transversales. Al hablar de una visión integral, nos referimos a una visión entera. La transversalidad favorece una visión entera o global del ser humano y de la naturaleza en general, armonizando todas las dimensiones factoriales de la persona.

 Educación para la paz y transversalidad

La transversalidad es un concepto que ayuda a humanizar la acción educativa, procurando una vida más digna para uno mismo y para los demás. Los temas transversales permiten reforzar los contenidos actitudinales, tan necesarios para que el ser humano se adapte a la vida y consiga su equilibrio emocional. Por ello, forman parte de los procesos de enseñanza-aprendizaje de cada área curricular y dinamizan la acción educativa escolar. Se ha de procurar que los alumnos desarrollen proyectos personales dignos, solidarios y esperanzadores.

El pleno desarrollo de la personalidad de los alumnos, objetivo básico de la educación, transciende con mucho unos objetivos relativos únicamente a la instrucción con los que podría contentarse una concepción convencional de la escolaridad, que tiene por meta única transmitir conocimientos y destrezas.

 La educación en valores en la institución educativa

La institución escolar ha de ser un ámbito en el que los alumnos/as protagonicen un proceso de personalización y socialización, traduciendo estos valores en propuestas educativas desde todas las áreas curriculares. De esta forma, los educandos reciben una formación integral de su personalidad, es decir, entera y completa. Hemos de partir de unos valores mínimos, expresados en el código ético, universalmente adoptado, de la Declaración de los Derechos Humanos. El centro educativo necesita abrirse a la vida, romper la distancia entre áreas curriculares y experiencia vital, desarrollar valores éticos y sintetizar desarrollo intelectual y afectivo. Se ha de integrar la instrucción de contenidos dentro del proceso educativo.

El enfoque educativo de la clarificación de valores consiste en ayudar al educando a tomar conciencia de lo que aprecia, elige y quiere. No se trata sólo de enseñar un determinado sistema de valores, sino de fomentar el proceso psíquico de valoración. La educación en valores no ha de limitarse a identificar o definir unos determinados valores objetivos, sino que ha de procurar que cada educando sea capaz de construir su propia estimativa de valores, interactuando con sus semejantes. Por ello tiene que haber una coherencia entre los medios personales, materiales y funcionales del centro. Claustro, consejo y asociaciones han de participar democráticamente.







Conclusiones

El propósito del artículo es reconoceré que la escuela y la calle  conforman un entorno propicio para la educación ciudadana, en la cual se realiza una serie de intercambios de valores, experiencias, habilidades, destrezas, conocimientos y alianzas estratégicas, así es como se producen un refuerzo de contenido social que se transmite a los ciudadanos por medio de valores compartidos entre los miembros de una sociedad. La paz es un valor universalmente reconocido y profundamente arraigado en la sociedad española. Una muestra de ello es la inclusión de la educación para la paz en los centros escolares.

Educar para la paz es una forma de educar en valores. La educación para la paz lleva implícitos otros valores como: justicia, democracia, solidaridad, tolerancia, convivencia, respeto, cooperación, autonomía, racionalidad, amor a la verdad. La educación en valores es un factor importantísimo para conseguir la calidad que propone nuestro sistema educativo.

La educación para la paz no es una opción más sino una necesidad que toda institución educativa debe asumir. Venezuela en los actuales momentos sus profesionales en la rama educativa están llamados a refundar la misma bajo los principios para una convivencia pacífica entre pueblos y grupos sociales lo cual han convertido en un imperativo legal. Ahora se trata de conseguir que el derecho formal de la paz se convierta en un derecho real.



Referencias


FERNÁNDEZ, A., y otros (1994): Educando para la paz: nuevas propuestas. Granada, Universidad de Granada.

GONZÁLEZ, Fernando (1994): Temas transversales y educación en valores. Anaya. Madrid.

HICKS, D., y otros (1993): Educación para la paz. Madrid, Morata

Lamas, (2017). Pedagogía y convivencia escolar para la paz. Recuperado de Revista Vinculando: http://vinculando.org/sociedadcivil/pedagogia-convivencia-escolar-para-la-paz.html

LOPEZ, M. (Dir.) (2004)Enciclopedia de paz y Conflictos, Servicio de Publicaciones, Universidad de Granada.

SEMINARIO PERMANENTE DE EDUCACIÓN PARA LA PAZ (1994): Educar para la paz. Madrid, Asoc. Pro-Derechos humanos.

 SINGER, L. R. (1996): Resolución de conflictos. Buenos Aires, Paidós.

Universidad Bicentenaria de Aragua (2016). Manual para la Elaboración, Presentación y Evaluación del Trabajo de Grado y Tesis Doctoral de los Programas de Postgrado. San Joaquín de Turmero Edo-Aragua.

VIGOTSKY, L. S. (1979). El desarrollo de los procesos psicológicos superiores. Barcelona, Crítica.


15 comentarios:

  1. INTERESANTE ANA MARIA ESTE ARTICULO RECUERDA QUE EL QUE EDUCA PARA LA PAZ EDUCA PARA LA VIDA.DEBEMOS PROFUNDIZAR ESE TEMA TAN IMPORTANTE EN LAS ESCUELA.FELICITACIONES BUEN TRABAJO.

    ResponderBorrar
  2. gracias liz. Por tu aporte si es muy importante manejar este trabajo de Educación para la Paz en nuestros hogares y escuela.

    ResponderBorrar
  3. Sin lugar a duda que La educación para la paz no es una opción más sino una necesidad que toda institución educativa debe asumir y esforzarse por alcanzar de manera productiva y significativa este aprendizaje. Es por ello que en la ACTUALIDAD La moderna educación para la paz asume creativamente el conflicto como un proceso natural y consustancial a la existencia humana, de allí pues CONCUERDO totalmente contigo que La paz es un valor universalmente reconocido y profundamente arraigado en la sociedad. Este tema es tan importante que no ha de quedar solo en una simple investigación hemos de buscar maneras en la que se pueda incluir de la educación para la paz en los centros escolares de Venezuela. FELICITACIONES BUENA INVESTIGACIÓN. =)

    ResponderBorrar
    Respuestas
    1. gracias querida amiga Mourlise así es la educación para la paz no es una opción mas sino como tu dices una gran necesidad. Besitos gracias por tu comentario.

      Borrar
  4. Este blog ha sido eliminado por un administrador de blog.

    ResponderBorrar
  5. Felicitaciones Ana María, excelente enfoque al trabajo, estoy totalmente de acuerdo contigo que educar para la Paz es educar en valores, siendo este un tema de mucha importancia y relevancia en los hogares y las escuela hoy en día en la Venezuela en que vivimos, la familia principalmente los padres son los llamados a educar en valores formando una triada, familia, escuela y sociedad que es la que va a permitir afianzar los valores del niño, definitivamente es un tema para seguir discutiendo y analizando porque es bien interesante. Gracias Ana por compartirlo con nosotros.

    Dejo este pensamiento que nos llama a la reflexión.
    Educa al niño de hoy y no castigarás al hombre del mañana. Pitágoras.

    ResponderBorrar
  6. Buenas tardes, Ana, en primer lugar, “condensos” es un término que en tu título captó mi atención, siendo inevitable una imagen mental del proceso físico de la condensación en el que se produce un cambio de estado en la materia. Así, una condensación entre la escuela y la calle que se establezca como fin la paz escolar, ha de implicar una serie de cambios en las acciones que se dan en ambos escenarios, escuela como lugar de aprendizaje institucionalizado y calle como ese entorno en el que se inserta la escuela e interactúan los estudiantes. Por tanto, entre la escuela y la calle se requiere una interrelación que geste procesos de cambio basados en la corresponsabilidad de la educación para la paz, centrados en el aprendizaje de esos valores que mencionas como la justicia, la democracia, la solidaridad, la tolerancia, la convivencia…

    ResponderBorrar
  7. Maravilloso artículo Ana, resaltas la transcendencia de los valores inculcados en el hogar dentro de los procesos de socialización de los individuos , es el hogar el primer escenario educativo y en el cual se construyen bases sólidas en en desarrollo social de los niños.

    ResponderBorrar
    Respuestas
    1. gracias mi querida amiga Alexandra tienes toda la razón muy buen comentarios.saludos

      Borrar
  8. Un artículo donde se evidencia la responsabilidad que tienen los educadores al formar el futuro del mañana, es que la escuela, familia y comunidad deben trabajar en conjunto, para así lograr una educación donde los valores sean fortalecidos y puestos en práctica en todos los ámbitos donde hacen vida los estudiantes. Creando una convivencia pacífica entre pueblos y grupos sociales. .. Buen aporte, felicitaciones.

    ResponderBorrar
  9. Felicitaciones por tu producción sobre la Educación para la Paz como un camino de Aprendizaje ya que a través de la educación como ente transformador del hombre lo moldea y lo conduce a formase como hombres de bien tomando en consideración los elementos necesarios para generar una convivencia pacífica en cualquier contexto social. Estoy de acuerdo contigo cuando aseveras que la educación para la paz no es una opción más sino una necesidad que toda institución educativa debe asumir vista desde todos los actores sociales: escuela, familia y comunidad. Excelente aporte a la comunidad científica de la cohorte XXVIII. Exitos…..

    ResponderBorrar
  10. Buenas Noches, Apreciada Ana, el proceso y sistema educativo, debe orientarse a la satisfaccion de necesidades cognoscitivas con la finalidad de un empoderamiento inteligible de objetos, que permitan la materialidad de aprendizajes en la esencia del ser, y del relacionarse y que deben verificarse en entornos formales e informales de sociabilidad en los que la progresion del proceso educativo debe trascender sus evidencias. Saludos de parte del Dr Benny Marquez

    ResponderBorrar

ANA MARIA BENITEZ Correo Electronico :Portugueira@hotmail.com Teléfono; 0243 215...